jueves, 10 de agosto de 2023

ASESINARON (MORALMENTE) AL CARICATURISTA MATADOR

 

Por Germán Ayala Osorio

 

Asesinar el humor hace parte de las lógicas de una sociedad como la colombiana que se acostumbró a todo tipo de violencias (estructural, cultural- simbólica y física). Después del homicidio de Jaime Garzón, el país político entró en una profunda tristeza por la forzada partida del gran humorista y crítico político. Después de ese grave episodio, ahora emerge el “asesinato moral” como estrategia para acallar a los humoristas críticos. Bueno, por estos días el caricaturista Matador es víctima de esa práctica social y política.

El periódico EL TIEMPO, hoy en manos del mezquino magnate Luis Carlos Sarmiento Angulo, decidió prescindir del humor de Matador, por cuenta de un suceso de violencia familiar protagonizado por el caricaturista, Julio César González. Después de 10 años de cometido el error, enmendado al interior de su familia, un abogado cuyo nombre prefiero no recordar, hurgó en la historia judicial y encontró el motivo para que el diario bogotano optara por sacar de sus páginas al incómodo caricaturista.

En un rápido  “juicio sumario”, el periódico EL TIEMPO, hasta hace unos años de orientación liberal, tomó la decisión de sacar de circulación el humor de Matador. Lo hecho por el abogado y EL TIEMPO bien entra en la categoría “asesinato moral”. Expuesto el asunto en las redes sociales, González fue lapidado, pero antes de ser llevado al cadalso, su imagen de Padre y esposo fue enlodada y cubierta bajo una espesa capa de fango. Ese vergonzoso episodio que por varios años guardó junto con su esposa, fue descubierto y usado para asesinarlo moralmente.

Como víctima, Matador se vio obligado a hacer una declaración pública que, si bien va dirigida a sus hijos, la verdad es que constituye una denuncia de quien ha sido asesinado moralmente por quienes no pudieron vencerlo en el escenario del humor y mucho menos en el de la argumentación. Hace rato la derecha erigió al reconocido caricaturista en el enemigo del régimen. Asesinar moralmente, por supuesto, es menos grave que el homicidio, pero sobrellevar  los señalamientos morales resulta más doloroso, en particular cuando hay hijos de por medio. Lo curioso de todo esto es que todos los días, en los diarios, incluido EL TIEMPO, se registran hechos inmorales e incluso, eticidades contaminadas por el ethos mafioso que todos, por acción u omisión, hemos validado. En esas páginas, se registran las caídas de puentes o las coimas en vías mal construidas y mal iluminadas por el sol (II).

Sin duda alguna, Matador cometió un error espantoso. Quienes seguimos y disfrutamos de sus caricaturas estamos seguros de que la ética, para él, sí tiene que ver y, mucho, con el humor. Insisto en que una sociedad que asesina, física y moralmente, a sus humoristas y caricaturistas, deviene enferma y hasta inviable.




Imagen tomada de Blu Radio. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

“VAMOS A RECUPERAR EL PAÍS”

  Por Germán Ayala Osorio   En el ejercicio de la política suelen aparecer frases que bien pueden servir como eslogan de futuras campañ...