Por Germán Ayala Osorio
La dirigencia del ELN parece
vivir en un universo paralelo. Insisten sus máximos comandantes en hablar de un
proyecto revolucionario en defensa de un pueblo que solo existe en sus mentes,
pues no se explica cómo pueden decir que luchan por los intereses de aquel pueblo
sometido a un régimen, cuando esa misma guerrilla los desplaza, confina y
afecta sus ya deplorables condiciones de vida colectiva.
¿De qué pueblo hablan los elenos?
¿De las comunidades rurales que corren despavoridas de los enfrentamientos protagonizados
por tropas del ELN o de todos los colombianos que equivocadamente dicen
representar?
Esta organización armada ilegal
que dialoga con el gobierno del presidente Petro actúa militarmente en los
territorios, anclada a un universo simbólico que no tiene cimiento alguno con
realidades fácticas. No existe un pueblo o pueblos que hoy se sientan
objetivamente representados por una guerrilla que insiste en hacer una “revolución”,
a pesar de saber que no tienen la más mínima posibilidad de tomarse el poder.
A pesar de que su discurso se
torna cada vez más anacrónico, este es recogido por la ultraderecha colombiana
para mantener su vigencia. Y lo peor de todo es que consolida su arraigo en las
comunidades afectadas por las operaciones militares de los elenos y los
enfrentamientos con otros grupos al margen de la ley. La derecha y la
ultraderecha se sirven y benefician de la torpeza de los miembros del Coce para
leer la actual coyuntura cultural y política del país.
Mantener una guerra de más de 50
años los erosiona como grupo guerrillero y revolucionario y los convierte en
una agrupación que actúa sin norte y confundida entre doctrinas políticas que los
miembros del pueblo que dicen representar, no entienden o no están interesados
en comprender.
Su dirigencia se envejeció y
envileció. Se les fue la vida echando plomo y no transformaron nada en el país.
Nada cambió. Por estos tiempos, señores comandantes del ELN, la gente en Colombia
está “mamada” del conflicto armado interno. Las realidades cotidianas,
expuestas por los medios masivos, tienen agobiado al pueblo colombiano. Y no
precisamente al que ustedes tienen en mente.
El pueblo que los comandantes del
ELN tienen en mente, no existe. El pueblo de los años 60 y 70 ya no existe, así
las condiciones de pobreza, indignidad y exclusión se mantengan. Dejen de jugar
a la “revolución” y a la paz. No se burlen más del país y del gobierno que
creen a pie juntillas en aquello de la Paz Total.
Imagen tomada de Blu radio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario